La alimentación intuitiva, ¿la dieta "no dieta"?

 Por: Johanna De la Cruz

Muchos creen que tener una alimentación saludable se basa en restricciones pero eso es totalmente erróneo. Los bebés comen cuando tienen hambre y paran de hacerlo en cuanto su cuerpo da señales de saciedad. Sin embargo, la “cultura de la dieta” ha influido tanto nuestra sociedad que ha afectado hasta al funcionamiento de nuestro cuerpo. Al llegar a una etapa adulta nos ponemos las restricciones que sentimos que nos darán resultados, pero estos generan más deseo de la comida y llegan a evitar que nuestro cuerpo genere esas señales. 

La alimentación intuitiva, según la BBC, se basa en reconocer las necesidades nutritivas de nuestro cuerpo para así no caer en excesos y frustraciones. Evelyn Tribole y Elyse Resch, dos dietistas estadounidenses, en 1995 lanzaron el concepto de alimentación intuitiva. La fórmula que ellas propusieron fue el comer cuando se nos apetezca, parar cuando estás lleno y no relacionar las emociones con la comida. Esto nos hará conectar más con nuestro cuerpo y no generarle un estrés con las restricciones que las dietas promueven.

Aquí te dejamos algunos consejos para poder implementar la alimentación intuitiva en tu día a día:

• Dile NO a las restricciones de la dieta:

La mayoría de dietas no son sostenibles a un largo plazo, es por eso que mucha gente después de hacer “dietas restrictivas” vuelven a su peso inicial o aún más por ese deseo de comer después de tantas restricciones 

• La comida no es tu enemiga:

No existe “buena” o “mala” comida solo alimentos más nutritivos que otros. Trata de implementar la mayor parte de alimentos nutritivos en tu alimentación pero sin restringirte de alimentos que disfrutas como algún dulce, helado, hamburguesa, entre otros.

• Escucha las señales de tu cuerpo:

Tu cuerpo es sabio. Cuando sientas que estás satisfecho deja de comer y cuando sientas hambre permítete comer algo. No excedas tu sentimiento de saciedad porque estarás rechazando las señales de tu cuerpo y se te dificultara escucharlas después. Convierte la comida en una experiencia de placer, disfrutar cada mordisco, cada sabor y pregúntate cómo te sientes y si ya te sientes satisfecho.

• No relaciones alimentos con emociones:

Un alimento no es la solución a las emociones. Debemos aprender a reconocer las raíces de ellas y lidiar de esa manera en la manera en qué nos sentimos. Algún alimento puede hacernos sentir placer o disfrute cuando lo consumimos pero nunca arreglar alguna emoción, busca estrategias alternativas para lidiar con tus sentimientos. 

Recuerda que la alimentación intuitiva significa NO restricciones y NO reglas. Cuantas menos prohibiciones tengas, tu cuerpo se sentirá más feliz y lograrás escuchar mejor tus señales de saciedad y hambre para así tener una mejor relación con tu cuerpo y la comida. ¡Disfruta de la comida que para eso está hecha! :)